Lípidos y ácidos grasos transportados en lipoproteínas del plasma en mamíferos HDL. Efectos de dietas enriquecidas en ácidos poliinsaturados sobre los lípidos plasmáticos, linfáticos y hepáticos /

En este trabajo se estudiaron los contenidos y la composición de los lípidos transportados en las lipoproteínas del plasma y de la linfa de algunos mamíferos, así como las modificaciones que sobre estos lípidos y los del hígado producen los ácidos grasos de las series n-6 y n-3 aportados por la diet...

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Autor Principal: Maldonado, Eduardo N. (Autor)
Otros Autores: Aveldaño, Marta Isabel. (Orientador)
Formato: Libro
Idioma:Spanish
Publicado: 2000.
Materias:
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100 1 |a Maldonado, Eduardo N.  |4 aut 
245 1 0 |a Lípidos y ácidos grasos transportados en lipoproteínas del plasma en mamíferos HDL. Efectos de dietas enriquecidas en ácidos poliinsaturados sobre los lípidos plasmáticos, linfáticos y hepáticos /  |c Eduardo Néstor Maldonado. 
260 |c 2000. 
300 |a 156 h. :  |b il. ;  |c 30 cm. 
500 |a Directora de tesis: Marta Isabel Aveldaño. 
500 |a "Tesis Doctor en Biología". 
502 |a Tesis(doctoral)--Universidad Nacional del Sur. Departamento de Biología, Bioquímica y Farmacia, 2001. 
504 |a Incluye referencias bibliográficas. 
520 |a En este trabajo se estudiaron los contenidos y la composición de los lípidos transportados en las lipoproteínas del plasma y de la linfa de algunos mamíferos, así como las modificaciones que sobre estos lípidos y los del hígado producen los ácidos grasos de las series n-6 y n-3 aportados por la dieta, solos o en combinación con un agente hipolipemiante, el clofibrato. Debido a la relevancia de los lípidos y lipoproteínas del plasma en la patogénesis de la aterosclerosis se consideró de interés profundizar el estudio comparado con el hombre, un mamífero LDL, de los lípidos plasmáticos de algunos mamíferos HDL, naturalmente resistentes a esta enfermedad, como el perro, el gato y el ratón. Si bien se habían caracterizado parcialmente los lípidos y ácidos grasos del plasma humano y murino, la información sobre caninos y felinos era escasa, por lo que inicialmente se estudiaron las cuatro especies. Los tres mamíferos HDL mostraron un plasma rico en fosfolípidos (PL), principalmente en fosfatidilcolina (PC), mientras que en el plasma humano predominaron los triglecéridos (TG) y los ésteres de colesterol (EC). La composición en ácidos grasos (AG) del lípido total mostró diferencias cuantitativas entre las especies, aunque en todas predominaron los ácidos n-6, seguidos de saturados y monenoicos, siendo los ácidos n-3 componentes minoritarios, Todos los animales estudiados contuvieron más AG n-3 que el hombre. Las diferencias encontradas entre los animales HDL y el hombre, esto es, mayor riqueza en PL con AG altamente insaturados, podrían estar relacionados con la menor susceptibilidad que muestran aquellos al desarrollo de enfermedad aterosclerótica. Como los caninos son naturalmente muy poco propensos a desarrollar hipercolesterolemia y aterosclerosis, contienen elevadas proporciones de HDL en plasma y permiten la obtención de muestras abundantes, constituyen un excelente modelo para profundizar el estudio de éstas y otras lipoproteínas. En esta parte del trabajo se estudiaron las principales fracciones lipoproteicas y se compararon con las humanas. En el perro, las HDL fueron las lipoproteínas más abundantes del plasma y por lo tanto las principales transportadoras de PL, EC y colesterol libre.Las VLDL y las LDL contribuyeron de forma similar al transporte de los TG plasmáticos, otra característica no descrita en el hombre. La composición en clases de PL, así como de sus AG fue similar en las HDL, LDL y VLDL sugiriendo que los PL se intercambian libremente entre las LP circulantes. Al comparar la distribución de los cuatro lípidos principales (PL, TG, EC y colesterol libre) entre las tres lipoproteínas, éstas difirieron tanto en contenido como en composición entre humanos y caninos. Sin embargo, la cantidad total de lípido circulante fue similar en ambos. Si bien el 18:2n-6 fue el principal ácido poliinsaturado en los dos mamíferos todas las lipoproteínas del perro fueron más ricas en PL, y por lo tanto fueron también relativamente más ricas que las humanas tanto en PL como enAG de cadena larga como el 20:4n-6 y el 22:6n-3. Los datos permiten concluir que el perfil de AG de cada una de las lipoproteínas caninas difiere del de las humanas porque cada una tiene distintas proporciones de los lípidos mayoritarios. Así, se encontraron más AG n-6 y n-3 de larga cadena en el plasma canino que en el humano porque los perros tenían más HDL, su HDL tenía más PC y EC, y estos dos lípidos eran más ricos en tales ácidos polienoicos que los de humanos, Los resultados se discuten en base a la deficiencia que presentan los mamíferos HDL con respecto a los humanos en proteínas trasnferidoras de EC (y no así de PL) entre lipoproteínas del plasma. Como se sabía que dietas ricas en ácidos n-6 y n-3 inducían hipolipidemia, se decidió suplementar dietas con aceite de girasol (dieta n-6) o aceite de pescado (dieta n-3) y administrarlas solas o conjuntamente con un agente hipolipemiante, el clofibrato, para estudiar los efectos sobre el contenido y composición de los lípidos plasmáticos y hepáticos de ratón. Ni el peso corporal, ni el de órganos individuales, ni el contenido de lípidos en hígado o plasma, aumentaron luego de un mes de consumir estas dietas con tan elevado contenido de grasa (9 por ciento), lo que podría atribuirse a que la propia grasa poliinsaturada dietética estimuló la oxidación de AG en el hígado (o en otro tejido como la grasa parda). Además, tanto la dieta n-6 como la n-3 redujeron el colesterol, mientras que sólo la n-3 redujo a los PL, lípidos plasmáticos mayoritarios en el ratón, y en segundo lugar a los TG. Si bien el aceite de pescado aumentó el porcentaje de ácidos n-3 en los lípidos plasmáticos, su principal efecto fue disminuir significativamente las concentraciones de los ácidos n-6, mayoritarios en los PL, TG y EC. Con ello nos encontramos ante la paradoja de que, pese al exagerado y sostenido aporte de grasa poliinsaturada con la dieta, la concentración total de ácidos polienoicos en plasma disminuyó. Los efectos del clofibrato sobre las concentraciones y la composición de AG de lípidos plasmáticos y hepáticos fueron similares en general a los observados en ausencia de dietas ricas en ácidos poliinsaturados, e independientes del enriquecimiento previo en uno u otro tipo de ácido graso poliinsaturado inducido en los lípidos hepáticos y plasmáticos. Los aceites aumentaron levemente la cantidad de PL y TG por hígado mientras que el clofibrato, que estimuló el crecimiento celular, aumentó significativamente los PL y el colesterol libre por hígado sin modificar su concentración por gramo de tejido ni su relación (lo que demuestra un gran incremento de memebranas), mientras que redujo drásticamente tanto la cantidad como la concentración de TG plasmáticos y aumentó sólo levemente los hepáticos. Nuestros resultados sugieren que los TG podrían cumplir un papel metabólico importante no sólo como sustrato energético, sino también actuando en parte como dadores de grupos acilos para formar los nuevos PL que se requirieron para cubrir las demandas impuestas por el considerable crecimiento sufrido por el hígado.//CALIFICACION DEPARTAMENTO DE GRADUADOS Calificación de la defensa oral: Sobresaliente - 10 (diez) Fecha: 12/3/01 
650 7 |a Bioquímica.  |2 unbist 
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653 |a Bioquímica animal 
700 1 |a Aveldaño, Marta Isabel.  |4 ths 
859 |a AR-BaUNS  |b BIB. CENTRAL - Tesis  |h 040  |i B148 2001-550m  |k R  |p 113323/002 
859 |a AR-BaUNS  |b BIB. CENTRAL - Sector A - Tesis  |h 040  |i B148 2001-550m  |p 113324/002